El itinerario de este viaje, por el momento, es el siguiente:
Parto hacia París el 29 de abril. El día del animal. Que como todos saben es de gran relevancia para mí (¿?)
Hago escala en San Pablo, donde pienso vagar como extraño de pelo largo en La Terminal.
El jueves 30 de abril al mediodía llego a la Ciudad de Las Luces (¿me aceptarán con mi lamparita de 25 w quemada después de un 2008 de lo más estresante?).
El 5 de mayo al mediodía, me tomo el TGV (no, no significa Trago para Golosas Virulentas) que me va a llevar hasta Londres. Sí, sí, voy a pasar un buen rato debajo del agua. ¡Sin mojarme!
En Londres voy a cantar las canciones de los beatles, tomaré cerveza, brindaré por las mujeres que derrochan simpatía (que obviamente no soy yo) y lalala.
El sábado 9 a la mañana, tempranísimo como Magdalena Ruiz Guiñazú, arranco para Atenas, via plane. Posibilidades de que me quede dormida, pierda el avión y llore durante un año el costo del nuevo pasaje: 85,67%.
En Grecia aún no sé bien qué haré. Por lo pronto sé que el sábado lo paso en Atenas, porque hay un meeting muy grande de CouchSurfing, y creo que después arrancamos para Lefkada (miren las fotos y sufran).
El 12 de mayo, tengo que estar nuevamente en Atenas para ver a Depeche Mode.
Qué haré hasta el 16 a la mañana, es un misterio.
¿Qué pasa el 16 a la mañana? La nena (sí, nena) se toma el palo hacia Roma.
Mis planes en Italia también son bastante indefinidos, pero la idea (key word: idea) es ir a Siena y a Florencia también.
El 23 de mayo tengo que estar en Venecia, porque desde ahí sale mi tren de regreso a París.
Llego a París el 24 a la mañana y me quedo dando vueltas por la ciudad, llorando como una Magdalena (rellena con dulce de leche) porque no me quiero volver.
Posibilidades de que a último momento me agarre la locura e idee planes para largar todo a la mierda y quedarme allá: 99,97%
Casi a la medianoche, sale mi vuelo de regreso a Buenos Aires. Y todos estarán felices porque tendrán el gusto de volver a verme después de 27 días de ausencia. Que cuando se trata de mí, lo sabemos todos, es un montón de tiempo.
Parto hacia París el 29 de abril. El día del animal. Que como todos saben es de gran relevancia para mí (¿?)
Hago escala en San Pablo, donde pienso vagar como extraño de pelo largo en La Terminal.
El jueves 30 de abril al mediodía llego a la Ciudad de Las Luces (¿me aceptarán con mi lamparita de 25 w quemada después de un 2008 de lo más estresante?).
El 5 de mayo al mediodía, me tomo el TGV (no, no significa Trago para Golosas Virulentas) que me va a llevar hasta Londres. Sí, sí, voy a pasar un buen rato debajo del agua. ¡Sin mojarme!
En Londres voy a cantar las canciones de los beatles, tomaré cerveza, brindaré por las mujeres que derrochan simpatía (que obviamente no soy yo) y lalala.
El sábado 9 a la mañana, tempranísimo como Magdalena Ruiz Guiñazú, arranco para Atenas, via plane. Posibilidades de que me quede dormida, pierda el avión y llore durante un año el costo del nuevo pasaje: 85,67%.
En Grecia aún no sé bien qué haré. Por lo pronto sé que el sábado lo paso en Atenas, porque hay un meeting muy grande de CouchSurfing, y creo que después arrancamos para Lefkada (miren las fotos y sufran).
El 12 de mayo, tengo que estar nuevamente en Atenas para ver a Depeche Mode.
Qué haré hasta el 16 a la mañana, es un misterio.
¿Qué pasa el 16 a la mañana? La nena (sí, nena) se toma el palo hacia Roma.
Mis planes en Italia también son bastante indefinidos, pero la idea (key word: idea) es ir a Siena y a Florencia también.
El 23 de mayo tengo que estar en Venecia, porque desde ahí sale mi tren de regreso a París.
Llego a París el 24 a la mañana y me quedo dando vueltas por la ciudad, llorando como una Magdalena (rellena con dulce de leche) porque no me quiero volver.
Posibilidades de que a último momento me agarre la locura e idee planes para largar todo a la mierda y quedarme allá: 99,97%
Casi a la medianoche, sale mi vuelo de regreso a Buenos Aires. Y todos estarán felices porque tendrán el gusto de volver a verme después de 27 días de ausencia. Que cuando se trata de mí, lo sabemos todos, es un montón de tiempo.
Llego a Buenos Aires el 25 de mayo, un giorno tristisimo. ¡Y viva la patria!
1 comentario:
londres? parís? atenas? dpeche mode???? te odeiooooo!!!
(y me encantó el post!)
bon voyage, cherie!
a la prochaine!!
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