jueves, 25 de febrero de 2010

Cuando uno arma la mochila o la valija intenta elegir detenidamente qué llevar y qué no. Intentá llevar las cosas justas y necesarias, y al hacer ese análisis una generalmente comete errores, muchas veces termina llevando cosas que no necesita y termina dejando cosas que luego desearía tener a mano.

Para venir a Paraty, decidí traer la mochila chica, ya que sólo voy a estar unas tres noches. Como era de esperarse, ya casi al bajar de omnibus me estaba arrepintiendo de algunas elecciones. A saber:

- Cosas que podría no haber traído: las dos bikinis, el protector solar, el gel post solar

- Cosas que desearía tener acá: un paraguas (aunque para tener la opción de traerlo, primero debería adquirirlo) y un abrigo (no había lugar y me dije, "¿para qué?")

- Cosa que hice muy bien en traer: la compu y el libro! si sigue lloviendo así, ¡voy a pasar muchas horas en el hostel!



Actualización: me olvidé el cargador de la batería de la cámara...con la batería adentro. Así que no photos, please. Me van a tener que creer cuando les diga lo lindo que es paraty!

2 comentarios:

Marcelo dijo...

Yo también me olvidé la cáamara en el último viaje y me comí una linda puteada de Caro.
Habrá que hacerle caso a las madres y hacer la mochila dos días antes?

paulina dijo...

Nah, no hay que exagerar. Preparar la mochila con media hora de anticipación es más que suficiente.

Dicho sea de paso, encontré el cargado de la cámara al estar armando la mochila para volver a Río, lo que es aún mucho peor.